Quiero decir lo más
bonito que salga de mis dedos puntiagudos para que tus ojos lloren del dedal
que me puse, que tu saliva rebote de labio en labio suspirando e hinchándote
entera como esa enamorada. Querría decir alto y claro que la risa no fue lo
mejor que recibí, fueron las ganas de
vivir sabiendo que el amor estaba ahí, que existe y que no me equivoqué de
vocación, que cantarle a la vida no es la única razón, también está tu cuello
que melodioso susurra el amor y vive de pasión. Decir que de momentos vivo y
una voz llora tras de ti, la conciencia de haberte querido, el ángel de la
muerte siendo el simple portavoz de tu palabra, de mi agradecimiento eterno al
cielo por haberme dejado, no más que un momento, rozar tu pelo con el mío,
perder mis dedos en tus cigarros, aprovechar la saliva que sobraba, oler el
perfume que emanaba tu sonrisa humeante de palabras que de tiernas sonaban a
algo así como amor. No nací para morir contigo, sino para que imágenes tuyas
acaparasen mis últimos segundos en esta tierra. Didn't I, my dear?
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