El problema no es salir sin pillar, no es que te fume una
gorda valiendo poco más, no es siquiera que un argentino se la "foche" en tu
cara, el problema es no borrarla de mi mente un segundo, es llorar mis penas
con una canción, es rugir o montar lágrimas con demasiado alcohol y cigarros y
como dices tu, un buen porro para desahogar, olvidar… el problema es no tenerte
de nuevo en mis brazos, es no volver a verte, soñar con tus besos siendo los
últimos que recibiré, no imaginar tan solo la que pueda con una sonrisa borrar tus
dientes hermosos, tu nariz doblada, tus kilitos que son el aliciente a
quererte, tu inconsciencia, tu falta de amor que me mata mañana y noche, tu
eres el problema de mis ojos, de mi boca y de mi alma que sigue derramando
lágrimas estúpidas y poco llevaderas…
Llévame a casa y con un abrazo zanjamos esto. Ja! Que
sencillo sería no soñar con una mirada melodiosa, una lengua juguetona, una
palabra bonita… siento no haber valido la pena, pero te juro que lo superaré y
algún día te reirás de mi infantilismo, de mi falta de carisma y rogarás a los
santos más benévolos que vigilen mi alma enferma al borde de un barranco, de un
apartamento…
En medio de gemidos te escribo porque eres la única, eres la
diosa que bajó a la tierra para enseñarme que la muerte existe en vida, que el
no tenerte es rodar sin camino ni destino… te quiero y no se por qué, te adoro sin
razón y mis ojos te esperarán siempre para saber si es verdad, si nuestra
historia será alguna vez contada. Hasta entonces, cigarro en mano, seguiré
sufriendo calladito, pero bien bonito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario